lunes, 21 de febrero de 2011

Tras 19 años, Empalme volverá a tener un tren de pasajeros

 Desde el 1º de marzo próximo, y luego de casi 20 años sin contar con el servicio, un tren de pasajeros volverá a detenerse en la estación local. Las gestiones para que esto suceda fueron realizadas por la filial local del sindicato La Fraternidad, para la formación que une Rosario Norte con la estación Retiro, en Capital Federal.
“Para nosotros, para los compañeros ferroviarios y para todo el pueblo y la región esto es una noticia espectacular, y por eso para ese día estamos preparando una gran fiesta que resuma la alegría popular de volver a tener un tren de pasajeros después de más de 19 años sin servicio”, se alborozó el secretario general de La Fraternidad de Empalme, Roberto Avila.
Las gestiones se iniciaron hace algunos meses, y la base del pedido tuvo sus sólidos fundamentos en la participación popular. “Juntamos más de cinco mil firmas a favor del proyecto”, contó Jorge Puebla, integrante del sindicato que en esta localidad nuclea a unos 40 trabajadores.
“Salimos con las planillas a todos los pueblos vecinos, cada vez que había una fiesta o concentración de gente. Después los trámites siguieron ante la Secretaría de Transporte de la Nación, desde donde ya nos dieron el visto bueno y nos confirmaron la fecha de la primera parada: el 1º de marzo”, amplió el gremialista.
En rigor, la estación Empalme Villa Constitución contará con una “parada facultativa”, según la define el antiquísimo pero vigente reglamento ferroviario. Ello significa que la formación se detendrá si hay pasajeros, quienes luego de ascender podrán adquirir su boleto a bordo del tren.
El servicio que presta la empresa TBA para unir la estación Rosario Norte con Retiro “pasa por Empalme a eso de las 2 de la madrugada, y llega de vuelta a nuestro pueblo aproximadamente a las 23”, detalló Puebla, quien estimó que el boleto costará alrededor de 27 pesos, unos 50 pesos menos que un pasaje en micro.
“Este trámite lo iniciamos a pedido de mucha gente careciente de aquí, de los pueblos vecinos y también de Villa Constitución, que necesita viajar por distintos motivos a Buenos Aires y se les hace imposible afrontar el costo de un pasaje de micro”, explicó Avila.
Solidaridad. “Esto demuestra que ningún objetivo es imposible cuando uno le pone garra, amor y corazón a lo que hace, y principalmente si esas acciones favorecen a los sectores más desprotegidos de la sociedad, hacia donde siempre apuntó nuestro sindicato”, sostuvo el sindicalista.
En efecto, la filial Empalme Villa Constitución de La Fraternidad mantiene una impronta solidaria que reflejó en diversas tareas en beneficio de la comunidad.
Así, un grupo de jóvenes que se desempeñan en su órbita se encuentra por estos días pintando las instalaciones de un jardín de infantes y en agosto pasado el sindicato agasajó a los niños en su día, con viajes en tren hasta la vecina Villa Constitución.
“El costo del boleto era un alimento no perecedero, y juntamos una montaña para entregar a los más carecientes. Comenzamos a la mañana y terminamos entrada la noche. La alegría fue indescriptible, porque la inmensa mayoría de los pibes jamás había viajado en tren, desconocían esta experiencia maravillosa”, recordó Puebla.

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