El Concejo sancionó la inédita medida para los trenes de carga y subió el canon a los camiones. En este caso se llevará a 16 pesos por camión ingresado a las playas habilitadas y 24 pesos por vagón que acceda a empresa o terminal portuaria habilitada para tal fin.
El Concejo de esta ciudad aprobó por unanimidad una reforma a la ordenanza tributaria por la que eleva el monto por derecho de estacionamiento a los camiones e incorpora una tasa a los vagones de ferrocarril.
En este caso se llevará a 16 pesos por camión ingresado a las playas habilitadas y 24 pesos por vagón que acceda a empresa o terminal portuaria habilitada para tal fin. Hasta el momento en la zona San Lorenzo cobra una tasa de sobrecarga a los camiones, y Puerto una tasa de estacionamiento, pero nunca se había intentado cobrar a la actividad ferroviaria que en los últimos tiempos se ha incrementado notablemente en toda la región.
Tanto en el NCA como a través del Belgrano Cargas, los trenes terminan su recorrido en Puerto para descargar en varias terminales de la ciudad que están equipadas para recibir formaciones ferroviarias.
Tal como ocurre con los camiones, las empresas actuarán como agentes de percepción de los importes: "Con ese dinero nos encargamos de mantener los accesos, la iluminación y controlar que en las playas habilitadas los camioneros tengan todos los servicios", sostuvo el intendente Carlos De Grandis.
En su articulado, la nueva ordenanza expresa: "Las respectivas empresas o entes prestatarios que utilicen este servicio y forma de transporte como receptor final de la carga, actuarán como agentes de percepción de tales importes, los que deberán ser ingresados a la municipalidad dentro de los 8 días de percibidos".
Además, "en el supuesto de no efectuarse la percepción, será exigible por el municipio el pago del tributo en forma directa a los usuarios, consumidores, o receptores de dicho servicio, en el mismo plazo". Es decir que se busca comprometer a las empresas del mismo modo que lo hacen con el transporte de camiones.
Por otra parte el intendente aclaró que se trata de un gravamen por el estacionamiento y no por el tránsito: "La situación de Puerto es distinta a la de otras localidades donde el tren pasa. Acá llegan, maniobran se estacionan y descargan" y agregó: "A nadie se le escapa que el movimiento de trenes ha aumentado mucho con todo el impacto que eso trae aparejado en la ciudad, además la tendencia es que con el tiempo se vaya incrementando y debemos actualizarnos para esto".
Sin acuerdo. Lo cierto es que previa a la decisión de reformar la ordenanza hubo varias reuniones entre el municipio y las empresas ferroviarias en busca de consensuar una tasa pero nunca hubo acuerdo: "En todo momento buscamos que sea por consenso pero no se pudo, así que no nos quedó otra que fijarlo a través de una ordenanza", dijo De Grandis.
Es notorio el aumento del movimiento de cargas a través del ferrocarril, lo cual se comprueba con las largas esperas diarias en los pasos a niveles, con formaciones que en ocasiones superan los 70 vagones, y ello "produce un alto impacto ambiental en los bienes y en los habitantes de esta comunidad", advierte la ordenanza.
También se remarca que en esta ciudad "el tren no solamente recorre su geografía, sino que ejecuta maniobras de diversa índole tales como el ingreso directo a playas de estacionamiento, a los fines de descargar su contenido, se han extendido los ramales y las obras mejorando el en el tráfico de trenes, hecho que aumenta la plusvalía y la ganancia de las empresas ferroviarias disminuyendo el tráfico de camiones y de esta maneras en los ingresos que percibe el municipio por el Derecho de Estacionamiento".
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