Para la Justicia, es el principal sospechoso de haber disparado contra el militante del PO Mariano Ferreyra. Pero él asegura que es un "perejil".
Buenos Aires. Cristian Favale, barrabrava que era buscado desde el viernes por su aparente vinculación con el crimen de Mariano Ferreyra, se entregó ayer a la Justicia y ascendió así a dos la cantidad de detenidos por el caso, tras la captura del dirigente sindical Pablo Díaz.
La presentación voluntaria de Favale se produjo en medio de autoproclamas sobre su “inocencia” y casi al finalizar un paro de más de 12 horas en la línea Roca, decretado por la Unión Ferroviaria en repudio del arresto de Díaz.
Si bien la Justicia dispuso el secreto de sumario por 10 días en la causa, la magistrada Susana Wilma López y la fiscal Cristina Camaño intentarán escuchar a los detenidos, cuyos allegados ratificaron su voluntad de “declarar” para aclarar su situación.
Favale, de 37 años, aseguró en las últimas horas que era “inocente” y que podía reconocer al autor del disparo que mató a Ferreyra al señalar que llevaba un tatuaje de un payaso en el brazo derecho.
Fuentes del sector dijeron que un hombre con esas características trabaja como guardatrén en la estación Constitución de la línea Roca y que además llevaba en el tatuaje la inscripción “Guardia Imperial”, que alude a la hinchada del club Racing de Avellaneda. Los informantes dijeron que al parecer era “un activo barrabrava” de ese club y que el cargo de guardatrén implica la máxima autoridad de una formación.
Favale, quien es padre de tres niños de corta edad y vive en Florencio Varela, se entregó en la Unidad 28 del Servicio Penitenciario en la alcaidía de Tribunales de la Capital Federal, desde donde fue trasladado a la División Asuntos Internos de la Policía Federal.
Hasta poco antes de entregarse, Favale participó en la red social Facebook, la misma en la que había “colgado” sus fotos con los ministros Amado Boudou y Alberto Sileoni y con la periodista de 6,7,8, Sandra Russo. Por un lado, dijo que las fotos fueron “solamente de cholulo”. “Yo no estoy ligado al Gobierno, si no, no estaría pidiendo un puesto de trabajo en la Unión Ferroviaria”, sostuvo.
Por el otro, hizo una advertencia: “Soy totalmente inocente y me quieren dejar engarronado con un crimen que no cometí (…) es más fácil encanar a un perejil que a un trabajador de la Unión Ferroviaria. Yo sé muy bien quién tiro”, dijo.
Ya detenido, aseguró que confiaba “en Dios y en la Justicia” y consultado sobre el crimen de Ferreyra dijo: “Más vale que soy inocente”. Su abogado, Sergio D’Amico, destacó su “voluntad de declarar” en la causa.
Según el abogado, Favale “trabajó hasta el año pasado en la Unión Ferroviaria, pero actualmente ya no pertenecía a este gremio”. Luego señaló que, según le contó su cliente, le habían ofrecido “volver a ingresar” al sindicato y que por eso concurrió a la marcha que buscó impedir un corte de vías. D’Amico afirmó que su cliente “niega rotundamente” haber estado armado y agregó que Favale le contó que “en el lugar estuvo, pero no es el autor material del hecho”.
En tanto, Díaz, delegado de Unión Ferroviaria, se encuentra detenido desde el sábado tras ser arrestado en un club de la localidad bonaerense de Adrogué por efectivos de la Policía Federal. Díaz, de 44 años, participaba anteanoche en un club de una reunión con “un grupo de gremialistas de la union ferroviaria” y se lo detuvo por orden de la jueza López.
“Él vive en Florencio Varela y estaba en un club de Adrogué con dirigentes de la Unión Ferroviaria y, cuando terminó la reunión, personal de Policía Federal lo esperaba afuera y procedió a la detención para evitar disturbios”, concluyó. Díaz sería el encargado, en el Roca, de reunir al grupo que fue a desbaratar el corte de vías impulsado por el PO.
Desde el Partido Obrero –en el que militaba Ferreyra– se siguió reclamando que la investigación se dirija al secretario General de la Unión Ferroviaria, José Pedraza. Néstor Pitrola, uno de sus dirigentes, reclamó también que se investigue si existe algún tipo de relación entre los ministros Amado Boudou (Economía) y Alberto Sileoni (Educación) y Favale.
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