miércoles, 2 de febrero de 2011

El último incidente en la vía ferroviaria deja tirados a 950 viajeros de ocho trenes

Esta vez la culpa fue de la avería eléctrica que sufrió un tren en la estación de Boo de Guarnizo .

La avería eléctrica provocada por el enganchón del pantógrafo de un tren volvió a descubrir la situación en que se encuentra la línea férrea Santander-Palencia, en la que semana a semana no dejan de acumularse incidentes en la vía. Ayer los afectados fueron 950 pasajeros y ocho circulaciones, entre ellos dos Alvia.
Este incidente de ayer no es un hecho aislado. Al contrario, se trata del último de una larga serie de percances a lo largo del recorrido principalmente en el tramo entre Santander y Reinosa. Nada menos que el tercero en diez días y el quinto en poco más de un mes. Y en cifras globales, un total de 1.649 pasajeros afectados y quince trenes perjudicados.
Alrededor de las 13.40 horas de ayer, el tren de Media Distancia que cubría el recorrido entre Valladolid y Santander, al salir de la estación de Boo de Guarnizo sufrió lo que desde Adif se atribuye como «enganchón». A la altura del cambio de agujas, el pantógrafo (dispositivo que pone en contacto la máquina con la catenaria, por la que le llega la energía al tren) se trabó con el cable de alimentación y dejó sin servicio eléctrico a la vía.
El incidente obligó a poner en marcha a Renfe el habitual operativo para transbordar a los pasajeros, plan que se mantuvo hasta las 17.20 horas, cuando Adif dio por concluida la reparación.
En ese intervalo se vieron afectados dos Alvia. Los pasajeros que iban a viajar desde Cantabria a las 14.05 en dirección a Madrid fueron trasladados en autocares hasta Palencia, en cuya estación se había retenido al que cubría el servicio en sentido inverso y que había partido de la capital de España a las 13.30 horas. A esos viajeros que se trasladaban hacia Cantabria les montaron en otros autocares que ya les aguardaban en la estación castellana, y rindieron viaje en Santander a la hora prevista. Los usuarios de los trenes de Media Distancia y Cercanías, por su parte, fueron transbordados en uno y otro sentido entre las estaciones de Santander y Guarnizo.
De modo que, con este incidente, los parlamentarios del PP, por un lado, y el delegado del Gobierno, Agustín Ibáñez, por otro, cuentan con un nuevo dato que presentar en sus respectivos encuentros con representantes de Adif y Fomento, citas que han solicitado casualmente esta misma semana.
Explicaciones
Los primeros, ante el presidente de la empresa que gestiona la red ferroviaria, de quien han requerido su comparecencia ante la Comisión de Fomento para que explique «las causas de las numerosísimas incidencias en la vía entre Santander y el límite con Palencia». Y lo hacen a instancias del parlamentario cántabro José Joaquín Martínez Sieso, que en su día calificó de «intolerable» la proliferación de estos incidentes «con una catenaria que se avería en verano si hace calor o en invierno porque hace frío».
También el delegado del Gobierno, en su reunión con responsables de Fomento, Adif y Renfe solicitada para estos días, podrá aportarlo como una justificación más a su interés por conocer los detalles de las actuaciones que están programadas para esta línea. Ibáñez, de hecho, espera regresar de Madrid con planes concretos -fechas, plazos, partidas presupuestarias- referentes a la ejecución de obras de renovación en los tramos entre Reinosa y Bárcena de Pie de Concha y Torrelavega y Santander. Unas obras, por otra parte, que están contempladas en el Plan de Inversiones 2007-2010 previsto en el contrato Fomento-Adif. Recientemente, el ministro de Fomento, José Blanco, ordenó agilizar las actuaciones para iniciar cuanto antes la modernización de la catenaria de esta línea. Lo hizo tras la conversación telefónica que el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, mantuvo con él el día 22, conversación en la que apremió a no demorar las actuaciones administrativas tendentes al arreglo de la catenaria. Sin embargo, hasta la fecha sólo se ha actuado en el tramo Reinosa-Mataporquera. Se invierten 7 millones de euros en la renovación y modernización de la catenaria, obra que está a punto de acabarse, con algunos meses de retraso.

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