La próxima construcción del anillo ferroviario de pruebas para tecnología y trenes de alta velocidad en Antequera, complementario al Centro de Tecnologías Ferroviarias, situará a Málaga como referente europeo en tecnología para la alta velocidad y generará miles de puestos de trabajo. Sin embargo, la otra cara de este proyecto es la posible pérdida de más de 50.000 jornales anuales en el campo y que la Vega de Antequera puede quedar hecha añicos. Más de 1.100 hectáreas de tierra fértil y productiva desaparecerán y otras tantas habrán de convertirse, en el mejor de los casos, en porciones de secano. Así lo auguran desdeAsaja Málaga, una vez puesta al corriente por los medios de comunicación que el proyecto se gestó hace casi un año, mientras que unos de los principales sectores afectados, los agricultores, conocieron la puesta en marcha del mismo hace apenas un mes. Desde entonces, Asaja Málaga ha mantenido conversaciones con distintos representantes para confirmar la existencia del proyecto y solicitar que, al menos, dicho proyecto se lleve a cabo con el menor impacto agrícola posible. “Es lógico que los proyectos de interés general primen sobre un sector concreto. Y, una vez más, los agricultores pagaremos las consecuencias de la puesta en marcha de este proyecto. Lo que hay que ver es si verdaderamente será tan beneficioso para nuestra provincia como se dice. Se habla de que se crearán miles de puestos para la ejecución y puesta en marcha del anillo ferroviario, pero, ¿qué pasará después? ¿Se irán los puestos de trabajo y nos quedaremos sólo con las vías? La aceituna, en cambio, hay que recogerla cada año”, se cuestiona Carlos Blázquez, secretario general de Asaja Málaga.
Asaja Málaga comenzó a recoger firmas nada más conocer la noticia la de la instalación de los distintos anillos ferroviarios en la vega antequerana para que las autoridades implicadas en el proyecto cuenten con los agricultores a fin de que dichos ejes ferroviarios causen el menor daño posible.
Cientos de hectáreas de olivar, de regadío extensivo, patata tardía de riego, productos hortícolas y viñas, así como algunas hectáreas de secano desaparecerán y donde antes se hallaba parte de la despensa de Málaga ahora correrán trenes. Asimismo, desde Asaja Málaga insisten en que a estos perjuicios directos se le deben añadir las afecciones indirectas: parcelas partidas, dificultad de accesos, afectaciones a sistemas de riego que pueden llegar incluso a convertir parcelas originariamente de riego en secano, inviabilidad económica de las fincas resultantes, etc...
Según ha podido saber Asaja Málaga, el anillo que se proyecta tiene un recorrido de cerca de 70 kilómetros y abarca una superficie de unas 20.000 hectáreas. La mayoría de esta superficie encerrada en el anillo es de regadío, por lo que el daño es aún mayor que si se tratara de tierra de secano porque las instalaciones de riego, muy costosas de por sí, quedarían dañadas en su conjunto. Además, los cultivos de regadíos, como se sabe, son los que más mano de obra generan y ahora los jornales quedarán claramente mermados. A estos daños directos e indirectos hay que sumar otro gran problema para los agricultores cuyas parcelas se sitúan cerca de las vías: las plagas de conejos que devoran parcelas completas de cultivo. Los taludes de las vías de AVE y autovías se convierten en refugio de estos roedores que llegan a ser una lacra, provocando cuantiosos daños en las fincas cercanas, un problema más que constatado en cualquier parte de la geografía nacional en la que se concentran este tipo de infraestructuras. Huelga resaltar además el impacto paisajístico que el proyecto tendrá sobre la Vega.
Asaja Málaga no se opondría a un proyecto que genere prosperidad a la provincia, pero se pregunta las siguientes cuestiones: ¿No se ha planteado un lugar menos fértil para su instalación? ¿Qué pasará con los agricultores que ya no pueden cultivar y que haciendo un esfuerzo económico ingente por seguir las directrices de la Unión Europea invirtieron en modernización para ser competitivos? Por todos los perjuicios que este proyecto acarreará a los productores en pos de un supuesto progreso, Asaja Málaga solicita que se tenga en cuenta el criterio de técnicos cualificados para que el trazo de los distintos anillos ferroviario dañe lo menos posible la vega de Antequera desde el punto de vista agrícola.
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